"evo no se meta usted en otras naciones. tenga respeto por los demás", le espetó el presidente peruano

El presidente de Perú, Alan García, consideró hoy que las declaraciones del jefe de Estado de Bolivia, Evo Morales, manifestando su apoyo a los movimientos de izquierda de América Latina, supone inmiscuirse en asuntos de otros países y "una falta de respeto a los pueblos"."Me parece que hay que diferenciar el que uno sea un dirigente político, y como dirigente político y ciudadano de América Latina, uno tiene derecho a apoyar a todos los amigos políticos que tenga, pero cuando uno es jefe de Estado, uno tiene que ser consciente de que ser jefe de Estado impone responsabilidades que impiden inmiscuirse o entrar en los temas internos".
"De esa manera uno falta al respeto a los pueblos, y los pueblos dentro de cada país tienen derecho a tomar sus decisiones sin que otros Estados intervengan", señaló García en declaraciones a un grupo de periodistas en San Salvador, donde ambos asisten a la XVIII Cumbre Iberoamericana.Preguntado sobre cómo se puede apoyar a naciones como el Salvador o Perú, casi solas entre una mayoría de Gobiernos de izquierda en la región, García dijo que la "democracia significa que cada uno dentro de su país explica su opción, explica su programa y el pueblo decide".
"Si el pueblo decide por una opción que no es un socialismo un poco trasnochado, colectivismo, estatismo, el pueblo tiene el derecho de tomar esta decisión y no hay quien deba meterse frente a la decisión del pueblo porque le falta al respeto al país".Morales expresó anoche a su llegada a San Salvador para asistir a la Cumbre Iberoamericana su "respaldo sincero y profundo" al "movimiento revolucionario" en el Salvador, en alusión al FMLN, la antigua guerrilla salvadoreña que concurre a las próximas elecciones en el país centroamericano.
El presidente de Bolivia puntualizó que su respaldo abarcaba también a los demás movimientos de ese tipo de la región, y criticó el sistema capitalista, según recogieron los medios locales.El FMLN, y su candidato presidencial, Mauricio Funes, se mantienen a la cabeza de las preferencias con miras a las elecciones del próximo año en El Salvador, aunque han disminuido su ventaja sobre el actual partido en el gobierno ARENA.