"En el caso de Bolivia, quiero dejar absolutamente claro que me opongo absolutamente y condeno cualquier intento de deponer de forma violenta a gobiernos democráticamente elegidos.Esa no es la política de nuestro gobierno. Tampoco es la forma en que los estadounidenses esperan que su gobierno se comporte".
Las 54 palabras que utilizó el Presidente Barack Obama para referirme a los 55 minutos que el Presidente Morales utilizó para exigir garantías sobre las supuestas acciones magnicidas que se ejercitan en su contra por "grupos terroristas", serán sin duda amplificadas al infinito por el enorme aparato propagandístico del MAS. Ha quedado muy claro, que mientras Venezuela ha buscado de modo positivo sacar partida de la circunstancia y reencauzar sus relaciones con el poderoso del Norte, Bolivia no ha buscado la normalización y se ve que Evo gana más personalmente sin Embajada, sin USAID, sin la DEA, sin el control sobre las actividades del narcotráfico. !Qué triste para Bolivia.!
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